PANAMÁ- Si bien en una nota dirigida a la Asamblea, el Presidente de la República había detallado que «se deben adoptar medidas que fortalezcan la lucha contra la corrupción», finamente el mandatario vetó un proyecto de ley que buscaba regular el conflicto de intereses en el sector público, por contar con seis artículos considerados «inconvenientes», y dos considerados «inexigibles».
El proyecto de ley 329 fue aprobado en tercer debate por la asamblea el pasado 26 de abril, habiendo estado a la espera de la sanción o del veto del Presidente de la República.
Según el texto del documento, existe conflicto de intereses cuando una situación actual o potencial de quien ejerce la función pública puede interferir o ser adversa a los intereses públicos; también cuando sus intereses particulares, de sus familiares o de sus donantes puedan influir en las decisiones relacionadas con su cargo, lo cual se manifestaría en una falta de imparcialidad en el ejercicio de sus competencias.
Además, el documento prohibía que un funcionario público reciba dos o más sueldos por parte del Estado, salvo en casos excepcionales establecidos por leyes vigentes. Tampoco se permitía desempeñar puestos con jornadas simultáneas de trabajo.
Resulta muy llamativo el veto del señor Presidente a esta nueva regulación.
Agencia FARO, Círculo Tradicionalista Nuestra Señora de la Asunción de Panamá