El hecho más reciente ocurrió en Jamundí, en la mañana del 12 del mes corriente. Una pared de la parte trasera de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario se derrumbó a causa del agua acumulada en la estructura por las intensas precipitaciones de las últimas semanas. La iglesia, ubicada en el parque principal del municipio, data de inicios del siglo XIX, y hace parte de la Arquidiócesis de Cali.
Pero no fue la primera ni la única. En Santiago de Cali, capital del departamento y sede episcopal, se vino abajo un muro de la fachada de la famosa Iglesia de San Francisco, de los padres franciscanos, patrimonio religioso y arquitectónico de la ciudad; lo que provocó afectaciones en el techo del templo, también construido a principios del XIX, y que pertenece a un complejo que incluye el convento, una torre mudéjar, la capilla de la Inmaculada y un museo de arte religioso. El desplome ocurrió en la noche del 24 de mayo, sobre la Plazoleta de San Francisco, en la que además se encuentra la Gobernación del Valle del Cauca. Las autoridades dicen que también se debió a la humedad acumulada en la pared de la iglesia.
Ninguna de las dos tragedias dejó, gracias a Dios, personas lesionadas.
Agencia FARO, Colombia.