Crónica de la sesión inaugural del Círculo Cultural Alberto Ruiz de Galarreta en Valencia

Como saben los lectores de La Esperanza, el domingo pasado, 30 de octubre, coincidiendo con la solemnidad de Cristo Rey, tuvo lugar la sesión inaugural del Círculo Cultural Alberto Ruiz de Galarreta. El acto, que congregó a una treintena de asistentes, fundamentalmente jóvenes, contó además con la presencia de dos familiares de don Alberto, que generosamente quisieron honrarnos con su compañía en este primer encuentro y nos hicieron saber su simpatía hacia nuestras iniciativas.

Tras las oraciones iniciales, la bienvenida y los agradecimientos, y antes de dar paso a las ponencias formativas, uno de nuestros correligionarios recordó, a modo de presentación, cuáles son los principales fines del Círculo, cuál su espíritu y el porqué de su nombre. Para las dos primeras cuestiones se remitió a la catequética síntesis trazada por Francisco Elías de Tejada acerca de la esencia del carlismo. Pues, en su sencillez, la explicación del maestro extremeño tiene la virtualidad de aclarar eficazmente, a modo de panorámica, lo que es y lo que no es nuestra santa Causa. Y, también, lo que es «pero no sólo»: legitimismo dinástico, venerable continuidad esencial histórico-monárquica y ortodoxia política. El carlismo consiste en estas tres cosas; y si se orilla, se desdibuja o se exagera cualquiera de estos elementos, es el carlismo entero el que queda desleído.

Así, excluido del horizonte de nuestra actividad cualquier tentación de desnaturalizar su objeto y la amplitud de su alcance, no pudo dejar de ser evocada —con cierto timbre de modestísimo homenaje— la figura de aquel que dedicó su vida entera a la militancia contrarrevolucionaria, y que presta su nombre a nuestro círculo. Precisamente tras recordar algunos de sus méritos incontables, se colacionó aquello que el propio don Alberto encarecía en uno de sus deliciosos escritos: los carlistas no debemos distinguirnos sólo por unas «ideas», sino por un estilo que debe rubricar nuestros actos y palabras: generoso, afable, bondadoso y cercano, animoso en todo pero intransigente en los principios, firme en los ideales. En una palabra: caballeresco.

A esta presentación siguieron las dos exposiciones doctrinales, sobre la pietas patria y la nobleza de la política. En ellas se recordaron algunas enseñanzas nodales de la filosofía clásica sobre sendos asuntos, y por ellas desfilaron grandes nombres de la tradición política católica contemporánea: Juan Vázquez de Mella, Eugenio Vegas, Francisco Canals, Rafael Gambra, Danilo Castellano, Miguel Ayuso, Juan Fernando Segovia…

Finalizadas ambas intervenciones, una distendida y animada tertulia sirvió para desarrollar un poco más algunas de las cuestiones apuntadas, así como para reafirmar la lealtad de nuestro círculo a S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón, a su Secretaría Política y a todos los mandos de la Comunión.

Emplazados para la primera reunión de lectura y comentario del libro de D. José Miguel Gambra, que tendrá lugar a finales del mes corriente, y tras la bendición final impartida por un sacerdote amigo, concluyó este primer acto con los ánimos renovados y las certidumbres de siempre confirmadas.

Círculo Cultural Alberto Ruiz de Galarreta