Restaurada la estatua de Belalcázar en Santiago de Cali

Foto: Mario Carvajal

Después de haber sido derribada el 28 de abril de 2021, la estatua de Sebastián de Belalcázar regresó a su pedestal el pasado viernes 4 de noviembre. Ubicada en el mirador del barrio La Arboleda, al oeste de Santiago de Cali, fue derribada por los misak durante el paro nacional de ese año.

Los trabajos de restauración empezaron en septiembre de ese año y costaron 290 millones de pesos, pagados por la aseguradora de la Alcaldía de Cali. Para evitar que se repita lo ocurrido fue reforzada con anclajes especiales que, según la Alcaldía, le dan más estabilidad.

Sin embargo, en el pedestal instalaron una fea placa que homenajea a los indígenas que murieron «defendiendo su territorio y su cultura de la violenta conquista española que los despojó de riquezas y poder e impuso su cultura occidental (sic)», cuyo texto fue concertado con el Archivo Histórico de Cali, comunidades indígenas y negras de la región y la Academia de Historia del Valle del Cauca.

Inaugurado el 25 de julio de 1937 para conmemorar el aniversario de la fundación de la ciudad, el monumento a Belalcázar fue encargado al escultor palentino Victorio Macho, autor que fue —además del Cristo del Otero y del sepulcro de Marcelino Menéndez Pelayo— de otra estatua del conquistador, ubicada ésta en el Morro del Tulcán (Popayán), derribada también por los misak el 16 de septiembre de 2020.

Vuelve, pues, Sebastián de Belalcázar a Cali. Ciudad que fundó el día del Señor Santiago de 1536. Le pese a quien le pese.

Agencia FARO, Colombia.