Estas divisas no suelen oponerse a la nacional, permiten mayor protección ante injerencias externas en el mercado
Los gobiernos de Brasil y Argentina han anunciado las discusiones para generar una moneda común. Primera «moneda sudamericana común», según reza el comunicado conjunto, sería la primera divisa compartida entre países hispánicos en los últimos dos siglos.
El fruto de esta moneda reportaría grandes beneficios al comercio y a la producción económica de ambos países, pudiendo traer ingresos indirectos a los vecinos americanos.
El uso de divisas semejantes, que no se opone a la moneda nacional, ha servido recientemente al crecimiento de India, Rusia o el mismo Brasil. Los gobiernos en la circunstancia propicia lo promueven también porque permite disminuir las presiones estadounidenses en el desarrollo de sus economías.
El fruto de esta moneda reportaría grandes beneficios al comercio y a la producción económica de ambos países, pudiendo traer ingresos indirectos a los vecinos americanos.
El uso de divisas semejantes, que no se opone a la moneda nacional, ha servido recientemente al crecimiento de India, Rusia o el mismo Brasil. Los gobiernos en la circunstancia propicia lo promueven también porque permite disminuir las presiones estadounidenses en el desarrollo de sus economías.
Agencia FARO