Continúa la tensión en Níger

Alassane Ouattara, presidente de Costa de Marfil. Archivo

Como se han informado los pasados días, los acontecimientos se suceden con rapidez en la región africana del Sahel. Los Estados de la UE han evacuado a casi todos sus ciudadanos de Níger, mientras otros países como Nigeria han cortado el suministro eléctrico a Níger, para presionar al nuevo «Consejo Nacional para la salvaguarda de la patria». Otros gobiernos, como el de Senegal, han reforzado el acceso a internet y las RRSS, Tik Tok incluido, para frenar entre sus habitantes los movimientos que apoyan a Níger y se dirigen contra los intereses de la UE. Ya lo dijo Macron el pasado 1 de julio, cuando media Francia estuvo en llamas: «la culpa es de las RRSS y de los videojuegos». El actual gobierno de Senegal ha tomado buena nota de esas palabras.

La ministra de Asuntos Exteriores de Rusia ha sugerido que «los asuntos de África los resuelvan los africanos». Haciendo abstracción de que los diversos dirigentes africanos de Níger en estos últimos 60 años de descolonización, no han sido capaces de resolver el problema del acceso a la electricidad para el 80% de su población aunque disponen de ingentes reservas de uranio, parece que no está clara la línea de actuación de los demás gobiernos africanos de la zona. Los actores en el incipiente conflicto se están dividiendo, porque mientras las autoridades de Costa de Marfil, otro de los miembros de CEDEAO, han manifestado su disposición firma a participar en una posible intervención militar contra Níger, para restaurar el statu quo previo a la destitución de su antiguo presidente; Burkina y Mali siguen reiterando su apoyo al nuevo gobierno nigerino que sigue manteniendo la paralización de las exportaciones de uranio y oro a Francia y a Estados Unidos.

Agencia FARO

Deje el primer comentario

Dejar una respuesta