CIUDAD DE MÉJICO. – El pasado jueves 21 de marzo, vísperas del Viernes de Dolores, se inauguró la exposición «Dolorosas de la Profesa en San Ángel». Ésta consiste en cinco pinturas de Nuestra Señora, en su advocación de los Dolores, procedentes del acervo de la Pinacoteca del Templo de San Felipe Neri. El museo del Carmen, donde se lleva a cabo la exhibición, ocupa el predio perteneciente al ex convento y colegio carmelita de San Ángel Mártir.
El evento se llevó a cabo poco después del mediodía, y consistió en unas palabras de la Lic. Eva María Ayala Canseco, directora del museo y del P. Luis Martín Cano Arenas, C.O., director de la pinacoteca filipense. Se contó, además, con la presencia en el presidio del P. César López O. Carm., una vecina de Chimalistac y otra de San Ángel. Como invitados, acudieron los estudiantes de la vecina escuela primaria «Prof. Jorge Casahonda Castillo».
Si bien el P. Cano expresó que «Nuestra Señora de los Dolores fue una devoción que cultivaron los padres del oratorio de San Felipe Neri a tal grado que, ya estando en ‘La Profesa’, construyeron una casa de ejercicios espirituales para varones (obra del arquitecto Manuel Tolsá, ejecutada entre 1799 y 1801), dedicada a esta advocación mariana», la licenciada Ayala remarcó que «no es una exposición de religión, es de pintura», y que su enfoque es mostrar la importancia del arte con fines estéticos y de sustento económico.
Las obras pictóricas son «La Porterita», atribuida a Nicolás Enríquez; «Virgen de los Dolores rodeada de ángeles», atribuida a Cristóbal de Villalpando; «El Calvario», de Miguel Cabrera; «Virgen de los Dolores», de Bartolomeo Mancini, y «La Virgen de los Dolores con san Juan Ignacio y san Felipe Neri», de José de Alcíbar; También se exhibe una talla en madera proveniente del Museo de Arte Religioso del Ex Convento de Santa Mónica, en Puebla. Ésta última se exhibe en un altar de Dolores.
Tras las breves palabras de ambos directores, se procedió a la exhibición, con algunas explicaciones sobre las obras. Al término de este recorrido, se dieron aguas frescas en el patio del acueducto, cortesía del Centro de Estudios Superiores Corbusé Parque Hundido.
Del inmueble, puede decirse que cumple 95 años de funcionar como museo, pues tras la exclaustración de 1861, fungió como juzgado, cárcel y cuartel hasta quedar en manos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en 1921.
Agencia FARO, Círculo Tradicionalista Celedonio de Jarauta.
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