A mediados del pasado mes el Ayuntamiento de la villa de Tarrasa (que no ciudad, título alfonsino) publicó por las redes un vídeo a propósito de la carta a los Reyes Magos. En él aparecía un individuo vestido de Rey Melchor, que instaba a los niños varones a no temer en pedir juguetes de niñas, como muñecas o conjuntos de maquillaje. Según decía, tradicionalmente se les ha enseñado que no son juguetes propios de ellos, sino de niñas, que él también tenía sus utensilios femeninos preferidos. Todo lo cual constituye una muestra más del avance de la ideología de género, que emponzoña cuanto toca, sin consideración alguna para nada sagrado.
De una manera que se quiere amable y dulzona se induce a los niños en el vicio contra la naturaleza y a pervertir su virilidad. Cosa que no es de extrañar en modo alguno, atendiendo a la reconocida condición de invertido del alcalde socialista de Tarrasa, quien ya se ha quejado en varias ocasiones de pintadas contra él por este aspecto. ¿Y cómo no iba a haberlas, si se cuenta que hasta los mismos demonios se burlan y escarnecen siniestramente a los que cometen el pecado contra la naturaleza?
Lucio Cisneros, Círculo Tradicionalista Ramón Parés y Vilasau