Estos días tienen lugar las reuniones del Consejo Europeo. A su llegada al edificio «Europa» Pedro Sánchez ha compartido las siguientes declaraciones a raíz de la invasión marroquí:
«No hay mayor aliado que España dentro de la UE para defender los intereses estratégicos de Marruecos y de la UE».
Parece que la situación en la que Sánchez coloca a España es la de defensora de los intereses del país cuyos miembros están protagonizando la invasión.
Estas declaraciones han venido acompañadas de lo que estima Sánchez como la base de la cooperación por la que él apuesta entre las relaciones hispano-marroquíes. «Las relaciones de vecindad que pueda tener la Unión Europea y España, en consecuencia, con Marruecos, se tienen que basar en dos pilares fundamentales: la confianza y el respeto a las fronteras europeas y españolas, de Ceuta y Melilla con Marruecos».
Sánchez agradeció la «solidaridad» de las instituciones europeas «por apoyar y respaldar a un Estado miembro». Desde el cobijo bajo las alas europeas que sostiene Sánchez, sostiene que «queremos una relación lo más constructiva posible», fundamentada en la «confianza y el respeto por las fronteras». Las fronteras no han sido definidas por Sánchez exclusivamente como españolas, sino también como europeas.
FARO/Círculo Hispalense. R. Loizaga