El Juzgado contencioso-administrativo número 3 de Zaragoza estimó el miércoles 26 de mayo el recurso interpuesto por la Asociación de Abogados Cristianos, considerando «contraria a derecho» la actuación del Ayuntamiento de Zaragoza, que colocó en su balcón la bandera del arcoíris el pasado 26 de junio de 2020, en muestra de su apoyo al «sector LGTBI».
La sentencia entiende que la actuación del Ayuntamiento es incompatible «con el marco constitucional y legal vigente, y en particular, con el deber de objetividad y neutralidad de las Administraciones Públicas».
Este mismo viernes el Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado una moción para recurrirla ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón.
La moción fue presentada por Podemos-Equo y votada a favor por todos los grupos municipales, a excepción de Vox, que se ha opuesto.
El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón (PP), ve conveniente presentar tal moción porque considera que hay «argumentos jurídicos» y, sobre todo, porque «hay que defender los derechos de las personas LGTBI». En vistas de que la moción pueda no prosperar, el alcalde del Partido Popular ha mostrado su compromiso con la «Justicia», asegurando que cumplirá la sentencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón, estime o no estime el recurso del Ayuntamiento.
En caso de que el recurso sea rechazado, se está planteando cómo llamar la atención de cara al 28 de junio, «día del orgullo» este año, para manifestar su absoluto apoyo a los «grupos LGTBI». El alcalde ha declarado que «el objetivo es seguir mostrando el apoyo a este colectivo de todas las maneras posibles».
El portavoz de Podemos, Fernando Rivarés, ha tildado de «manifestación brutal de homofobia» a la sentencia del Juzgado contencioso-administrativo.
En similares términos se han expresado los portavoces de PSOE, Cs y PP, mostrando su rechazo a la sentencia del Juzgado y la necesidad de recurrir para mostrar el apoyo a las «personas LGTBI».
Por su parte, Julio Calvo, portavoz de Vox, ha señalado que hablar de derechos LGTBI es un término antijurídico y ha manifestado su negativa a tratar los temas de identidad sexual en el debate jurídico, puesto que ya están «superados» y «hay cuestiones más importantes».
AGENCIA FARO, Navarra, A. de Jaso.
