Vecinos de Tortosa en defensa del monumento a la Batalla del Ebro

Concentración de vecinos en defensa del Monumento dedicado a la Batalla del Ebro. Gustau Moreno

TORTOSA, ESPAÑA– El Ayuntamiento de Tortosa, a instancias del Parlament de Barcelona, quiere desmantelar el monumento dedicado a la batalla del Ebro que se encuentra en dicha localidad.

En el año 2016, una consulta popular convocada por el Ayuntamiento para decidir sobre el futuro del monumento en cuestión, se saldó con el 68% de votos a favor del mantenimiento del mismo, a pesar de que el Ayuntamiento había utilizado todos los medios a su disposición para favorecer a la opción partidaria de la retirada del monumento. Ni siquiera el grupo político más votado de la ciudad en las últimas elecciones municipales se acerca a la cantidad de votos que logró reunir en 2016 la opción de mantener en su lugar el mencionado monumento.

Pero el Alcalde y los concejales de la localidad prefieren ignorar los resultados de la consulta popular, y continúan dando pasos para su desmantelamiento.

Pese a las presiones, incluso violentas, la Associació Tortosins Pel Monument, logró reunir el pasado domingo 6 de junio a dos centenares de tortosinos en defensa del acuerdo vecinal de 2016. Sin embargo, el pleno municipal del día siguiente no tuvo en cuenta ni la concentración ni el resultado de la consulta. Los promotores de la asociación convocante sólo tienen abierta la vía legal.

Los ejemplos de que en el actual momento histórico la democracia es una ideología y no una forma de gobierno son suficientemente elocuentes. En la última década, en el ámbito catalán se ha divinizado hasta la calaverada el mantra de «la voluntad de un pueblo» la anulación de dicha voluntad por la cacicada centralista impuesta desde Barcelona es significativa del carácter anticatalán, antiforal y antivecinal del gobierno de usurpación de Barcelona.

El monumento fue inaugurado en 1966. Ya entonces hacía décadas que el poder político escamoteaba el carácter de Cruzada de la guerra de 1936-1939, para sustituirla por la consigna desarrollista y un tanto irenista de los «XXV años de paz». El propio monumento responde en sus características estéticas a esa pretensión. Ya en su inauguración la prensa informaba que se trataba de un «homenaje de paz y de concordia», aludiendo a los «caídos», a secas. Es obra del escultor bergadano, avecindado en Tarragona, Lluis M. Saumels Panadés y tiene cierto regusto a parroquia posconciliar. En lugar de estar coronado por una Cruz lo está por un astro. La Cruz de Santiago fue relegada a un lateral. Su ubicación en la zona del viejo puente de la Cinta que destruyó el ejército rojo en 1938, realza y dignifica la visión del contorno de Tortosa. Ni a pesar de esto los caciques de Barcelona quieren mantenerlo.

AGENCIA FARO, Círculo Tradicionalista Ramón Pares y Vilasau de Barcelona. X Molins.