Un mes de la Convención constitucional de Chile

Sesión de la Convención constitucional chilena. CC UNO

SANTIAGO, CHILE-La Convención Constitucional cumplió este miércoles un mes desde su instauración. Pese al poco tiempo transcurrido, este mes ha sido extremadamente agitado: problemas en la puesta en marcha del edificio del ex Congreso (donde sesionan los convencionales), las declaraciones cruzadas entre algunos constituyentes y votaciones respecto a temas fuera de sus competencias.

A pesar de esto, la mesa directiva se amplió con la integración de siete vicepresidencias y ya están funcionando ocho comisiones transitorias que son importantes para el desarrollo del órgano. Si bien esto puede ser visto como un éxito, son los aspectos negativos los que más destacan.

Uno de esos aspectos es la declaración pidiendo el indulto a los presos de la insurrección de octubre de 2019, las agresiones verbales contra los constituyentes de la derecha, en estos últimos días, reflejado en el acoso al Convencional Jorge Arancibia, ex Comandante en jefe de la Armada, ex Senador y ex Edecán naval del General Pinochet. Arancibia, miembro de la comisión de derechos humanos, ha sido conminado a retirarse de dicha comisión por parte de sus colegas de la extrema izquierda, especial virulencia ha demostrado en esa iniciativa la activista mapuche Francisca Linconao.

A lo largo del mes de julio se han registrado declaraciones de muchos de los convencionales, (incluso por parte de la presidenta de la Convención Constitucional, la también activista mapuche Elisa Loncón) justificando o haciendo la vista gorda respecto de opiniones que justifican la violencia como método de acción política; durante este mes también se ha producido la invisibilización de la izquierda socialdemócrata; se han cancelado discursos; Se ha llamado «represión policial» a la defensa que Carabineros hizo el día de la inauguración para evitar que se repitiera en Chile lo qué pasó en el Capitolio; también se buscó promover una amnistía injusta para «presos políticos mapuches» desde el 2001, y tantos otros desvaríos (como las quejas por sesionar en un palacio, criticas respecto al bajo presupuesto de la convención y convencionales disfrazados de dinosaurios y personajes de dibujos animados pululando por los salones del ex Congreso nacional).

Hay que señalar que este comportamiento no se le puede atribuir sólo a los convencionales de la extremista «lista del pueblo», sino que muchos constituyentes del bloque socialista, del frente amplio y del partido comunista se han dedicado a tensionar a la asamblea de constituyentes.

A pesar de haber sido un periodo marcado por el conflicto, el poco trabajo, la violencia verbal e incluso la agresión física a algunos constituyentes, la presidenta Loncón y el vicepresidente Jaime Bassa organizaron una celebración por el mes de funcionamiento de la convención. En los jardines del ex congreso nacional, la mayoría de los convencionales se reunieron en torno a una ceremonia religiosa indígena para luego tomarse de las manos y participar de una ronda al son de la canción «El derecho de vivir en paz» (canción en homenaje al dictador vietnamita Ho Chi Minh) del cantautor comunista Víctor Jara, que se ha transformado en el himno de los partidarios de la revuelta de octubre de 2019.

En Chile a treinta días del inicio de la convención constitucional las tensiones políticas no disminuyen y se prevé que estas aumenten con el inicio de la campaña presidencial y parlamentarias.

Agencia Faro. Círculo Tradicionalista Antonio de Quintanilla y Santiago