Profanan el templo de una misión jesuítica boliviana

Imágenes sagradas destrozadas. Foto El Deber

LA PAZ, BOLIVIA– Un individuo destruyó este jueves cuatro imágenes sagradas de la iglesia de San Javier, ubicada en los llanos bolivianos del departamento de Santa Cruz. El hecho se suscitó cerca de las dos de la tarde de este 19 de agosto, en el Templo Misional del pueblo que forma parte de las misiones jesuíticas virreinales.

Las imágenes destruidas son de Jesús Nazareno y San Francisco Javier, entre otras, según informa la red Campanas, de la Arquidiócesis de Santa Cruz de la Sierra. El párroco del templo, Reinaldo Brumberger, O. F. M., que responde al Vicariato Apostólico Ñuflo de Chávez, denunció el hecho por teléfono.

Los testigos de la profanación contactaron a la Policía, que se presentó con rapidez para capturar al culpable, un joven de 22 años con aparentes problemas mentales. El padre Brumberger calificó esta afrenta como «lamentable atentado a la fe católica y propiedad privada», además de atentado contra el «arte sacro universal de las misiones jesuíticas de Chiquitos, patrimonio de la Humanidad».

El responsable de los destrozos subió al campanario de la iglesia de San Javier dos días antes, el martes 17, para tocar las campanas. Esta imprudencia causó disgusto en la población y la iglesia lanzó un comunicado para tranquilizar los ánimos.

La red boliviana de noticias Villantv compartió un video grabado por testigos en el que se ve al responsable gritar frases anticatólicas mientras ellos le preguntan la razón de su comportamiento. Entre otras cosas, él decía: «Esos santos no pertenecen a la casa de mi padre». «Esto va a salir para el mundo, para que ustedes sepan que han traicionado a mi padre», «A ver, decime algo, respóndanme, ¿por qué traicionan a mi padre? Yo no quiero ser severo con ustedes, pero ustedes lo quieren». Los comentarios al video muestran a protestantes elogiando la profanación y acusando a los católicos de idolatría.

La iglesia misional jesuita de San Javier fue diseñada por el arquitecto austríaco, Martín Schmidt, entre 1749 y 1752, por petición de los misioneros jesuitas en la provincia de Chiquitos de Santa Cruz. El templo fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1990, y su localidad forma parte de las reducciones jesuíticas fundadas entre 1696 y 1760, junto a Concepción, Santa Ana, San Miguel, San Rafael y San José.

La prensa boliviana (diarios Los Tiempos, El Deber y Página Siete) y la católica (ACI Prensa) han comunicado este hecho desde una perspectiva secular, lamentando el daño material, pero no el espiritual. Desde La Esperanza, pedimos actos de reparación por esta afrenta contra la Santa Iglesia Católica, depositaria de la fe en la religión única y verdadera.

Agencia Faro, Círculo Tradicionalista San Juan Bautista. A. Mariscal.