El «villano favorito»

Zamir Villaverde. Foto: Diario Gestión

PERÚ.- El pasado 12 de julio, el Poder Judicial peruano revocó la prisión preventiva del empresario Zamir Villaverde luego de ofrecerse como colaborador eficaz en los presuntos casos de corrupción del presidente Pedro Castillo. La participación de Villaverde es importante en las investigaciones, porque hasta el momento su información involucra a los prófugos Juan Silva, ex ministro de Transportes y Comunicaciones, al ex secretario presidencial Bruno Pacheco y al sobrino Fray Vásquez Castillo.

Como se recuerda, en un audio ofrecido como prueba al Ministerio Público y difundido por los medios de información, se aprecia que Villaverde entregó a Silva «100 grandes» como parte de una coima o comisión enviada por la empresa española Tableros y Puentes S.A. – TAPUSA para que le adjudiquen la construcción del Puente Tarata III, en la región San Martín. Además, en las grabaciones transcritas se lee también intereses de empresas chinas por otras obras públicas por las que se pagaría coimas.

Los audios refutan las declaraciones de Silva en los programas de televisión y radio nacional donde negó tenazmente conocer a Villaverde. Asimismo, en otros audios se escuchan conversaciones con Pacheco sobre los cargos públicos que ocuparían y sobre un maletín con un millón de soles entregados a Silva, del que Pedro Castillo tendría conocimiento. Por otro lado, el empresario también sostuvo en el programa Combutters (Willax TV) que las elecciones presidenciales del 2021 fueron fraudulentas, involucrando a funcionarios del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y a Vladimir Meza, amigo del presidente chotano, quien actuó como intermediario en pro de los intereses del partido político Perú Libre. Con ello, Villaverde también deja constancia que fue parte del grupo de confianza del presidente, a quien apoyó en la campaña y le prestó 30 mil soles mediante su sobrino Fray Vásquez, acusado también de traficar influencias y recibir sobornos.

Además, Villaverde declaró que tuvo reuniones en la conocida «casa de Sarratea», aunque su testimonio contrasta con la colaborada eficaz Karelim López y las investigaciones en el caso PetroPerú, el tráfico de influencias y cohecho en los ascensos de las fuerzas armadas y la policía, y en la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat). Igualmente, señala que todo lo expresado será corroborado con los audios que fueron y serán entregados a los fiscales correspondientes.

Finalmente, el exreo responsabilizó a Castillo y a su entorno por si se realiza un atentado contra su vida, pues el último miércoles en la noche acudió a la comisaría del distrito limeño de La Molina para denunciar un «reglaje» (vigilancia ilegal) de la policía a su domicilio, pero fue retenido por 4 horas. Según Mariano González, ministro del Interior, Villaverde permaneció en la comisaria porque tuvo una requisitoria no revocada y que el vehículo en su vivienda intentaba ofrecerle seguridad. Durante ese tiempo, varias personas se congregaron en la sede policial para exigir su liberación y le solicitaron que diga todo lo que sabe sobre la presunta organización criminal del presidente, convirtiéndose en las redes sociales en un «villano favorito».

Agencia FARO, Círculo Tradicionalista Blas de Ostolaza, Perú, Pedro Mateo Oliva Arróspide.