El día 21 de septiembre a las 10:30h dio comienzo el tercer curso del Círculo Alberto Ruiz de Galarreta en la ciudad de Valencia. Pese a las lluvias torrenciales con que se abrió el día, algo altamente inusual en tierras levantinas, ello no impidió que la inauguración congregase a 25 personas entre los habituales amigos del Círculo y algunos nuevos participantes. La sesión se desarrolló en un ambiente animado, con los asistentes deseosos de afrontar una nueva etapa con que seguir consolidando el Círculo.
Tras la tradicional oración al Espíritu Santo a cargo de uno de los sacerdotes asistentes y unas palabras del presidente del Círculo renovando nuestras lealtades, dio comienzo la jornada de formación política con la intervención de dos ponentes: Javier y Mario. Esta sesión ha sido la primera de un seminario sobre la cuestión de la propiedad cuya segunda parte se desarrollará en diciembre. En esta primera jornada se abordaron los fundamentos clásicos de la propiedad y algunos aspectos de su concreción histórica en la Cristiandad medieval; por tanto, cada uno de los ponentes desarrolló un bloque.
En la primera ponencia, se definió y confrontó el derecho de propiedad clásico frente a su concepción moderna; se fundamentó la propiedad desde la filosofía del derecho partiendo del derecho natural; y, se definieron los límites del derecho de propiedad en base a su función social.
En la segunda ponencia se dieron algunos detalles de la concreción histórica de la propiedad en el medioevo desde tres aspectos distintos: 1) la propiedad real; 2) la propiedad de la tierra y su vinculación; y 3) la propiedad gremial.
Tras finalizar las exposiciones doctrinales hubo un breve coloquio en el que se plantearon dudas suscitando un interesante intercambio que sirvió para desarrollar aún más algunos asuntos. No obstante, dado que las ponencias ya se habían dilatado bastante aportando mucha información valiosa, se consideró que era conveniente pasar al ágape para continuar la conversación.
Así, tras el rezo del Ángelus, cambiamos de sala para disfrutar de unas suculentas viandas que fueron ofrecidas principalmente merced al esmerado trabajo de las margaritas del Círculo. Las tertulias amicales, más distendidas, sirvieron para continuar con las conversaciones sobre los temas objeto de la reunión, al tiempo que para proyectar algunas iniciativas que debemos desarrollar a lo largo del curso. El ambiente y la calidad del aperitivo fueron excelentes, tanto que para algunos se prolongó y terminó convirtiéndose en la comida principal.
Círculo Cultural Alberto Ruiz de Galarreta (Valencia)
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