El pasado domingo por la noche fue hallado el cuerpo sin vida del Rvdo. P. Enrique Fabián Arcos Sevilla, presbítero, que fue reportado desparecido días atrás en la ciudad de Ambato, provincia de Tungurahua, Ecuador.
El sacerdote, de 53 años, fue reportado desaparecido el pasado 30 de octubre, cuando fue visto por última vez en la ciudadela Cristóbal Colón, en el sur de Ambato. Sus familiares pusieron la denuncia a la policía y fiscalía general para la búsqueda que se llevó a cabo con la esperanza de encontrarlo con vida.
Desafortunadamente, tras cuatro días de búsqueda, fue hallado sin vida en unos matorrales lleno de basuras y malezas, ubicado en un sector aledaño de la ciudad de Panzaleo, provincia de Cotopaxi. El occiso presentaba signos de violencias al punto de dejarlo desmembrado.
Este hecho dejó consternado, no solo a sus familiares, sino a toda la provincia Tungurahuense y alrededores. La diócesis de Ambato, a la que el presbítero estaba incardinado, ha lamentado esta pérdida, señalando al sacerdote como un ejemplo a seguir. El P. Arcos era muy querido por su feligresía por su labor pastoral. El mes pasado había cumplido 26 años de ordenación sacerdotal. También la conferencia episcopal ecuatoriana emitió un comunicado con motivo de esta desgracia y pidió rezar en sufragio de su alma.
La Policía Nacional sigue con las investigaciones para esclarecer el crimen. El vehículo del sacerdote asesinado fue encontrado calcinado en una zona al sur de Quito. Se sostiene la hipótesis de que los malhechores se habían ganado la confianza del P. Arcos para así robarle dinero y pertenencias. Habría sido secuestrado a un lugar desconocido, donde tuvo lugar su muerte violenta.
Esto sucede cuando el país hispanoamericano sigue siendo azotado por una crisis de seguridad que ha cobrado víctimas inocentes mediante secuestros, robos, asesinatos. Se teme que el número de incremente más que el año pasado.
El cuerpo del sacerdote será velado en el Coliseo de la Unidad Educativa La Salle, en el sur de Ambato. Para el jueves 7 de noviembre está programada una misa en la iglesia de Huachi Chico y, posteriormente, la inhumación en el sitio donde el sacerdote sirvió por última vez.
¡Que, por la misericordia de Dios, su alma pueda descansar en paz!
Agencia FARO, Ecuador. J. Arias.
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