Independencia, pero poca

Composición editorial desde imágenes de EFE y EP

Ponemos los ojos en las portadas del día. El tema más tratado es la política fiscal que Esquerra ha colocado en los planes de Gobierno. Los separatistas, ¡que quieren irse de España, robar sus regiones y no saber nada más del resto!, pretenden que la provincia de Madrid suba sus impuestos para amamantarles.

Cataluña lleva más de una década colgando de la subvención nacional. Los independentistas han socavado económicamente la autonomía; la región, la absorbe la deuda. Sus recursos actuales provienen de la condonación presupuestaria y autonómica que aportan las otras regiones. Más de 3.000 empresas han huido de Cataluña a Madrid tras el golpe de Estado separatista, recuerda hoy ABC. La mayoría de los recursos transferidos a Cataluña provienen de la recaudación madrileña.

¡Quién sabe si apretarán las tuercas a Madrid! Casi todas las autonomías callan. No tolerarán una subida fiscal en toda España. Pero nadie defenderá a Madrid si la saquean en solitario. ¡Pobre Madrid, Rompeolas del país! Como en la canción, ése es su papel en nuestra demogresca. 

La respuesta general del PP es el otro gran tema del día. Con oportuna prudencia, sólo el gallego Feijóo se sale del tiesto. Pide uniformización de impuestos «a la baja», informa el Faro de Vigo. El resto de peperos cierra filas. Bajarán impuestos en todas sus autonomías. «Génova y sus barones se comprometen», anuncia El Mundo. «Los barones del PP defienden» a Díaz Ayuso, La Razón. ABC, el más atrevido: «Rebelión del PP contra» Sánchez. ¡Qué mozalbetes más entrañables! Igual que antela Ley Celáa, hacen en su taifa estrictamente lo contrario del Gobierno.

Todos recordamos cuando éramos críos. A veces llega un chaval fresco, con carisma y toda la pandilla queda como prendada. Enseguida hay alguno que le imita en todos sus gestos y posturas, adoptando una pose forzada. Lo hace por entusiasmo o por envidia, pero siempre con lamentable resultado.

Un cambio de aires recorre el PP desde la moción de VOX. Suena forzado. Los peperos no han conseguido diferenciarse de Abascal. Su postura parece imitación: lanzándose a conquistar portadas, encuadrar cámaras, romper titulares. Con mucha menos maña que VOX, hay que decir.

Pese a lo podrido de sus principios y prácticas, VOX ha sabido centrar el foco mediático. El PP llega con retraso, con un perfume que recuerda a Nenuco y unas tácticas simplonas. Coge un berrinche y juega a lo contrario que la cuadrilla, sea lo que sea. Naturalmente, lo hace a solas.

Roberto Moreno, Círculo Antonio Molle Lazo de Madrid.