Fue, ciertamente, en época de Don Carlos VII y de Dña. Margarita, durante la Tercera Guerra, cuando los carlistas entregaron su cruzada al Sagrado Corazón de Jesús, como había solicitado de modo universal el Papa Pío IX. Mas, si el día de la beatificación de Santa Gema, 14 de mayo de 1933, coincidió por entero con el 200 aniversario del «Reinaré en España», fue el 2 de mayo de 1940 que Su Santidad Pío XII pronto la canonizó, en una fecha doblemente evocadora para los tradicionalistas: 1940, por el nacimiento de Don Sixto Enrique, al que Dios guarde muchos años más, y 2 de mayo, jornada españolísima y contrarrevolucionaria, por la jura de bandera de Su Alteza en la Legión. Y otra anécdota: el Duque de Aranjuez, descendiente directo de Luis XIV de Francia, comparte fecha de nacimiento, 22 de julio, con Santa Margarita María Alacoque.
Así mismo, en 1889, que es el año en que el Rey Don Javier venía al mundo, coincidiendo con el 1300 aniversario del III Concilio toletense, en el cual que se concretó la Unidad Católica de las Españas, Su Santidad León XIII elevaba a rito de primera clase la fiesta del Sagrado Corazón, por alcanzarse, de manera simultánea, el Segundo Centenario de la encomienda devocional que Nuestro Señor entregó a Santa Margarita María Alacoque para Luis XIV. Pero el 25 de mayo de 1899, fecha exacta del décimo cumpleaños de Don Francisco Javier, aquel mismo Papa hizo público el texto del Annum Sacrum (al que nos hemos referido con anterioridad, en lo que concierne al estigma de Santa Gema Galgani) para renovar la previa consagración sacrocordiana que se había llevado a cabo en época de la Tercera Guerra Carlista. Una nota más: toda vez que la beatificación de Galgani correspondió, de manera absoluta, como hemos hecho constar, con el 200 aniversario del Reinaré, Bernardo de Hoyos sumaba 21 años cuando hubo de dar Fe de aquello, que es la misma edad a la que Santa Gema recibió su primer estigma (al cual le puso término, según ya se ha dicho, en el curso del Annum Sacrum, el Sagrado Corazón de Jesús). Adicionalmente, fue un 29 de noviembre cuando nuestro señalado jesuita falleció, y también un 29 de noviembre el día en que Su Santidad Pío XI tuvo a bien reconocer en Galgani la virtud de Venerable (como además fue dado, en aquella misma fecha, el feliz nacimiento de Su Excia. Revma. el Arzobispo Marcel Lefebvre).
Ha querido la Divina Providencia, y en esto no hay conjetura, que de Lucca se nos brindasen dos excelentes mujeres: la Reina Dña. Margarita y Gema Galgani, santificadas por la caridad hacia los enfermos. El resto de sugestivas convergencias entre el promisorio Sagrado Corazón y los Borbón Parma, por vía de supuesto, queden dichas, sin vicio de numerología, pero pareciera en la práctica que lo aquí manifestado, con Santa Gema como nudo y como intermediaria, fuese un añadido al testimonio del Beato Hoyos, redoblando todo aquello que enlaza el Reinaré con la legitimidad de nuestra Causa. Agreguemos justamente, para concluir, sin dejar de tener en cuenta el conjunto de aquellas correspondencias, que el mismísimo corazón de Santa Gema Galgani se halla desde 1985 alojado en la capital de nuestro huérfano reino.
Rubén Navarro Briones, Círculo Tradicionalista San Rafael Arcángel (Córdoba)
