ESPAÑA, SANTANDER- Varios municipios del norte de España han aprobado medidas contra las actividades agrarias y ganaderas. Las restricciones, que continúan una dinámica general en el país, fueron motivadas por las presiones del sector turístico.
Hace años que numerosos pueblos españoles reciben turistas urbanos, que buscan escapadas rurales. Desde entonces han aumentado las quejas por aspectos de la vida rústica que no parecen del agrado de los huéspedes.
Por esta razón, consistorios santanderinos como los de Bareyo o Comillas, y recientemente el de Ruiloba, han prohibido abonar en verano. Comillas incluso llegó a impedir «los cencerros de las vacas» cerca de las viviendas.
El turismo acalla las campanas de la Iglesia
La disputa entre los intereses turísticos y la vida local no se queda en la producción económica del lugar. La parroquia de Herrera de Ibio afrontó la queja de la dueña de una casa turística: el tañido de las campanas molestaba a sus huéspedes.
Debido a la presión de esta pensión para turistas, el pueblo de Herrera tuvo que aguantar varias semanas sin que las campanas dieran las horas. Sin embargo, los vecinos se movilizaron y no pararon hasta recuperar el tradicional reclamo de la misa.
Las campanas vuelven a sonar en Herrera de Ibio, en Cantabria. El párroco las silenció hace tres semanas porque los turistas decían que no podían dormir. https://t.co/BU4FXfjPGA
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) August 10, 2022
En algunos municipio de la zona, como el mencionado Comillas, la frecuencia de las quejas llega a ser tediosa. Ante la insistencia, la Policía local comillana publicó el siguiente mensaje en sus redes:
«Queremos recordar a los visitantes que vienen a disfrutar de nuestro pueblo que hay ciertas actividades que realizan ganaderos, agricultores y pescadores que forman parte también del encanto de esta tierra».
Tras esta nota didáctica, el cuerpo policial aconseja a los turistas que: «no pierdan el tiempo llamando a la Policía quejándose de ruidos u olores derivados de estas actividades porque no vamos a hacer nada en absoluto, al contrario, nuestro apoyo total».
Agencia FARO, Círculo Cultural Antonio Molle Lazo
