Se aprueba el «matrimonio homosexual» en Chile

Palacio de la Moneda iluminado con los colores corporativos de un grupo homosexualista promovido por los poderes públicos. Foto T13. Chile

SANTIAGO, CHILE- Se aprueba el «matrimonio homosexual» en Chile Esta última revisión al proyecto de ley también fue aprobada por la Cámara de Diputados por 82 votos contra 20 y 2 abstenciones. Tras tres años en el Congreso, el «matrimonio» entre personas del mismo sexo será ley en Chile.

La iniciativa que promovió dicha legislación fue del gobierno socialista de Michelle Bachelet, pero inexplicablemente Sebastián Piñera fue quién decidió impulsarlo a mediados de este año, contradiciendo todas sus promesas electorales y sus más «profundas convicciones» como «católico observante». Es evidente que esta medida se enmarca dentro de la desesperada tarea por parte del gobierno por lograr algún «legado» a los ojos de la ciudadanía, especialmente teniendo en cuenta que el segundo gobierno de Sebastián Piñera es uno de los más repudiados en toda la historia de Chile.

Chile se convierte así en parte de las 31 naciones que permiten el «matrimonio homosexual» en el mundo y en el séptimo país de Hispanoamérica.

A diferencia del actual Acuerdo de Unión Civil (AUC), la figura legal vigente en Chile desde 2015, esta normativa permite la filiación y la adopción por parejas homosexuales.

Si bien esta medida ha sido celebrada por los grupos de activismo aberrosexualista como el autodenominado LGTB (etc), la noticia ha pasado sin mayor trascendencia, pues todo el interés lo concentra la disputada carrera presidencial de segunda vuelta.

Por su parte, el arzobispo de Santiago, Cardenal Celestino Aós manifestó tibiamente su opinión respecto a la futura ley: «Importan las leyes, pero importa que revisemos nuestras propias opciones y nuestras relaciones dentro del matrimonio y la familia, para que sean matrimonios y familias cristianos». Previo a esto, indicó que: «En nuestras circunstancias se nos pide diálogo y fidelidad. Solo podemos alcanzar un diálogo fructífero si presentamos lealmente nuestra visión y proyecto del matrimonio y familia». En ningún momento la alta autoridad eclesiástica manifestó su condena al proyecto, ni menos se habló de sancionar a los legisladores católicos que concurrieron a votar dicha ley inicua.

Agencia FARO, Círculo Cultural Antonio de Quintanilla y Santiago.